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Ojeras oscuras
¿Qué son las ojeras oscuras?
La piel del contorno ocular es la más fina del cuerpo –5 veces más que la del resto de la cara– y, por ello, acusa especialmente los problemas estéticos. Uno de los más comunes, tanto en personas jóvenes como en edades más avanzadas, son las ojeras, debidas a una alteración en la coloración de la piel de debajo de los ojos.
Este oscurecimiento de la zona confiere al rostro un aspecto cansado y “apagado” y, principalmente, puede estar ocasionado por.
- Exceso de pigmentación (melanina), lo que confiere un color más oscuro.
- Adelgazamiento de la piel, de modo que la red vascular de debajo se transparenta, y aparece una tonalidad morada.
- Hundimiento en la zona que va del ojo a la mejilla (surco nasoyugal), como consecuencia del cual las ojeras todavía se evidencian más.
¿Cómo podemos prevenir las ojeras?
La prevención consiste en cuidar la piel del contorno ocular y evitar los factores que favorecen la pigmentación o la congestión. Dormir lo suficiente, proteger la zona del sol y mantener una hidratación adecuada ayuda a preservar la luminosidad del área de los párpados. Reducir el cansancio visual, evitar frotarse los ojos y seguir una rutina de cuidado diario específica para el contorno puede disminuir la aparición de círculos oscuros.
También resulta útil adoptar hábitos saludables como limitar el consumo de sal, evitar el tabaco y moderar el alcohol, ya que todos ellos influyen en la retención de líquidos y en la apariencia general de la piel. Cuando pese a estas medidas las ojeras persisten, un especialista puede orientar el tratamiento más adecuado.
¿Cuándo debemos consultar con un médico?
Causas y cómo eliminarlas
Tratamiento de las ojeras oscuras
Es recomendable acudir a un especialista cuando las ojeras no mejoran con descanso, cuando se acompañan de bolsas persistentes o cuando interfieren con el aspecto y la calidad de vida. Un profesional podrá diagnosticar el tipo de ojera, diferenciar entre pigmentación, hundimiento o problemas vasculares y proponer el tratamiento más adecuado.
Preguntas Frecuentes
Es aconsejable acudir a un especialista si las ojeras aparecen de forma repentina, si se acompañan de inflamación persistente o si afectan de manera notable al aspecto pese a mantener buenos hábitos.
Pueden reflejar falta de descanso, genética, alergias, hiperpigmentación o cambios vasculares. No siempre indican una enfermedad, pero sí una alteración en la piel periocular o en la microcirculación.
Ningún órgano concreto. Su origen se relaciona con la piel del contorno ocular, la vascularización, los senos paranasales y la retención de líquidos.
Algunas ojeras se asocian a déficit de vitaminas como la K o la C, aunque esto no suele ser la causa principal. Siempre debe valorarse dentro del contexto global.